Sabemos que en estas fechas es “complicado” cuidarse y seguir una dieta estricta (por no decir “casi imposible”) para no engordar.
Pero no queremos engordar durante las fiestas y, desde nuestro Departamento de Nutrición, hemos preparado algunos consejos que podéis seguir a la hora de enfrentaros a una comida o cena festiva. Lo ideal es no tirar por la borda todos los esfuerzos realizados con los programas de pérdida de peso.
Consejos nutricionales para no engordar durante las fiestas
Nuestra primera recomendación es llegar a la hora de la celebración sin mucha hambre. No te saltes las comidas anteriores para poder comer en la fiesta. No comer nada o muy poco durante el día te provocará ansiedad y te hará sentir hambre excesiva. Es más recomendable llegar con poco apetito.
Para empezar, modera los aperitivos y canapés. Suelen ser bocados deliciosos pero también pequeños concentrados de calorías. Espera a los platos principales como ensaladas, verduras, carne o pescado.
Intenta evitar el pan. Si puedes elegir, escoge aquel que tenga fibra vegetal. Los alimentos ricos en fibra, arrastran en el intestino el exceso de grasa ingerido ese día. Serán de gran ayuda.
Controla el alcohol: engorda. Opta por el vino tinto que es algo más ligero que el blanco, aunque también aporta muchas calorías. Aquellos que quieran seguir su dieta de adelgazamiento deben beber sólo una copa con la celebración.
Elimina las grasas de tu plato en la medida de lo posible: retira la piel del pavo, el tocino de la carne y trata de limitar las salsas, guarniciones…, todo lo que no sea esencial para degustar ese guiso. En la mayoría de los casos es dónde se encuentra la mayor cantidad de calorías.
Controla las cantidades. Generalmente en estas celebraciones el banquete es muy copioso y variado, procura que tus raciones sean moderadas. Intenta no repetir.
Saborea cada bocado. Come despacio, deléitate con la calidad de los alimentos, no con la cantidad.
Los pasteles, turrones, helados y dulces son auténticas bombas calóricas. Nos puede ayudar a controlar nuestro deseo de tomar un postre, finalizar la comida con una infusión o un café.
No debemos abusar de la comida aunque estemos en buena forma o no nos importe engordar. Cuando comemos en exceso nuestra digestión es más pesada, nos encontramos peor. Disfruta del ambiente festivo y de la compañía, es un día muy especial que va más allá de los placeres culinarios.
Mantente en movimiento. Después de la comilona huye de la silla, sal a bailar, o da un paseo. Te ayudará.
Y como estas fiestas son muy largas… ¡Equilibra! Resulta muy útil hacer una dieta desintoxicante un día a la semana (a base de frutas, verduras, cereales integrales…). Puedes complementarla con nutricosmética… ¡y prepararte para la siguiente celebración! También puedes contratar una empresa de catering